Pese a la goleada ante Arsenal por 4 a 0, en la Boca continúan las polémicas. Ayer, más que núnca, se pudo notar el distanciamiento (hasta aquí disimulado, por lo menos dentro de la cancha) entre Riquelme y Palermo.
El goleador xeneize logró superar el record de Roberto Cherro (218 goles), al alcanzar los 219 goles con la camiseta de Boca, luego marcaría uno más, el 220. Pero este nuevo desafió superado por Martín Palermo, de alguna manera se vio empañado por la distancia que existe entre el 9 y el 10. Tras el primer gol de Martín, luego de una asistencia de Roman, el enganche ni se acercó para saludarlo o felicitarlo por el logro. En cambio, cuando Riquelme marcó su tanto, el tercero de Boca, Palermo sí se acercó y lo abrazó en el festejo.
Tras la derrota sufrida ante Colón, Martín Palermo había pedido que se tomen decisiones para sacar a Riquelme de Boca y así pudiera arribar Guillermo Barros Schelotto como entrenador. Seguramente ese fue el detonante para que el 10 comience a mostrar en publico sus diferencias con Palermo.
0 comentarios:
Publicar un comentario